Lo ilícito es lo contrario a lo lícito, es decir a lo legal, lo establecido como correcto en una sociedad desde el punto de vista moral. Lo ilícito se refiere al quebrantamiento de la ley, al orden al establecido y a lo correcto desde el punto de vista ético. Por ejemplo, un funcionario público es destituido de su cargo por cometer actos ilícitos en su administración. En este caso, un acto ilícito en administración pueden ser varios delitos como peculado doloso, malversación de fondos, corrupción, entre otros. Cada acción está fuera de la ley y de la moralidad como funcionario público y por tanto es considerado como ilícito. Los actos considerados como ilícitos están en todas las esferas de la sociedad por lo que se requiere un alto nivel moral para identificarlos, denunciarlos y hacer justicia.